A menudo los clientes piensan que la mejor opción para ellos de cinta reflectiva es la más brillo tenga y aunque en cierta parte tengan razón, no debemos olvidar que el brillo es solo un factor a tener en cuenta al elegir una cinta reflectante.

Existen otros factores más decisivos al momento de comprar que también deben ser considerados. Estos son color, flexibilidad, precio, longevidad, adhesión, contraste, iluminación competitiva y dispersión de luz.

En base a todas estás características se elaboran diferentes tipos de cintas que buscan satisfacer la demanda de cada mercado en relación al uso al que están destinadas.

Por lo general, el brillo o reflectividad de una cinta se ve afectado por su material de fabricación y su tipo de color. Las cintas blancas (plateadas) , por ejemplo, son el color de cinta más brillante independientemente del material con el que estén constituidas.

«Todas las cintas son brillantes de cerca. Es a medida que uno se aleja que empieza a notar una diferencia.»

En la siguiente tabla podemos ver ordenadas las cintas reflectivas en relacionando su color con su brillo, siendo la superior (blanca) la más brillante y la inferior (rojo) la menos reflectiva.